Qué es el Swift y cómo funciona
Si estás familiarizado con los pagos y cobros internacionales, seguramente ya sabrás qué es porque muy posiblemente forma parte de tu día a día, pero tanto si lo sabes como si no, te recomendamos que leas este post porque desgranamos todos sus detalles y su funcionamiento.
El código Swift es una serie alfanumérica de 8 a 11 dígitos que identifica al banco receptor cuando se realiza una transferencia internacional. Este código es gestionado por Swift, Society for Worldwide Interbank Financial Telecommunication, por sus siglas en inglés, que traducido al castellano sería Sociedad de Telecomunicación Financiera Interbancaria Mundial. Se trata de una sociedad cooperativa formada por sociedades financieras y no financieras en más de 200 países, que actúa como sociedad de mensajería entre sus miembros, es decir, no hace envíos ni recepción de dinero si no que establece un sistema de datos compartidos y una red de telecomunicaciones mundial, para agilizar las transferencias internacionales, reducir sus costes y aumentar su seguridad. Este sistema surgió a mediados de los años 70, pero ha sido con la globalización de las últimas dos décadas cuando ha empezado a ser realmente relevante y ha sustituido casi completamente a su predecesor, el Telex. Los 8 a 11 dígitos que lo componen tienen el siguiente significado:
- Código de entidad: corresponde a los 4 primeros caracteres y sirve para identificar a la entidad financiera. Por ejemplo, el código de entidad de Bankinter es BKBK y el de Banco Sabadell es BSAB.
- Código país: los dos siguientes dígitos permiten identificar el país del banco receptor. Para el caso de España se utiliza el código ES.
- Código de la localidad: los dos siguientes dígitos, el séptimo y el octavo, están reservados para la localidad del banco receptor.
- Código de oficina: estos tres dígitos finales son opcionales y con ellos se identifica a la oficina de la entidad financiera que recibirá la transferencia. Si se indica XXX o no se indica nada, significa que no se especifica la oficina y la recibirá la sucursal principal de la entidad.
Si algún día, en lugar de Swift, ves que alguien se refiere a él como BIC (Bank Identifier Code), nada debe alterarte porque es exactamente lo mismo. De hecho, en muchas ocasiones verás que muchas personas se refieren a él como BIC/Swift.
Si eres exportador debes siempre tener a mano el código Swift de tus cuentas bancarias para no retrasar tus cobros, lo recomendable es incluirlo en la forma de pago de las facturas que emitas a tus clientes internacionales, de esta forma el receptor no tendrá que buscarlo.
Existen varias formas de averiguar cuál es tu código Swift. Puedes consultarlo fácilmente en una búsqueda en Google poniendo Swift seguido del nombre del banco, pero te recomendamos que lo consultes directamente desde tu zona de usuario web del banco o lo solicites a tu gestor u oficina.
No es necesario incluir el Swift en el caso de transferencias SEPA porque este tipo de transferencias tienen lugar en la Zona Única de Pagos en Euros cuyas transacciones han pasado a equipararse a las nacionales. Las principales diferencias entre transferencias Swift y Sepa son:
- Divisa de pago: las transferencias SEPA son sólo en euros, mientras que las Swift pueden ser en cualquier divisa siempre que la entidad financiera esté adherida a este servicio.
- Costes: mientras que las transferencias SEPA, gracias a la normativa que las regula, tiene los mismos costes que una transferencia nacional, las transferencias Swift tienen unos costes más elevados debido a la existencia de bancos intermediarios y comisiones por cambio de divisa.
- Ámbito geográfico: mientras que las transferencias SEPA son sólo para los países miembros de la UE, las transferencias Swift son aptas para cualquier país siempre que las entidades intervinientes en la transacción formen parte de Swift.