La tasa WACC es un concepto fundamental para los inversores financieros. Esta métrica es la tasa a la que se actualizan los flujos de caja futuros de una empresa para poder valorarla así que, un pequeño cambio en ella, modifica el valor de las empresas y es causa de movimientos en los mercados financieros porque los principales inversores institucionales la utilizan para valorar empresas y encontrar oportunidades de inversión: cuando calculan que una empresa está por debajo del mercado compran acciones y las bolsas suben y viceversa, venden y los mercados bajan si creen lo contrario. La tasa WACC se calcula a partir del coste de capital de la empresa, que es el que exigen los accionistas, el coste financiero del endeudamiento obtenido por la empresa, la proporción de fondos propios respecto al nivel de endeudamiento y la tasa impositiva que asume la empresa por sus beneficios.