El saldo de financiación bancaria para empresas sigue cayendo
El saldo vivo en financiación para empresas sigue cayendo según los últimos datos publicados por el Banco de España, que no hacen más que confirmar la tendencia iniciada en 2009. Aunque el ritmo al que cae se va moderando, todavía no está siendo suficiente la concesión de nuevos créditos por parte del sector bancario para sustituir el vencimiento de los que siguen vigentes. Al cierre de febrero el saldo quedaba en los 881 mil millones de euros, una reducción del 0.90% respecto a los 888 mil millones de 2017 y muy lejos ya de los 925 mil millones de 2015.
Por vencimientos de deuda, en lo poco que llevamos de año hasta los datos de febrero, parece que se podría invertir la tendencia de los últimos tres años, en los que ha caído mucho la financiación a corto plazo mientras incrementaba la de largo, posiblemente por el apetito inversor de las empresas ante unos tipos históricamente bajos. Con los nuevos datos de 2018 cae el saldo vivo para todos los vencimientos, de forma muy tímida, pero cae: un -2.47% en los plazos inferiores al año, un -1.93% entre 1 y 2 años y un -1.72% en los plazos a más de 2 años.
En cuanto a las nuevas operaciones se mantiene el patrón ya visto en 2017, crece la financiación para las empresas pequeñas y medianas, aquellas que consumen operaciones inferiores a 1 millón de euros, y caen las de las grandes empresas. Esta tendencia de las grandes empresas a diversificar sus fuentes de financiación hacia canales no bancarios es posible gracias al acceso de mercado de capitales, al que las pequeñas y medianas no pueden acceder. En cuanto a los datos anualizados de febrero las operaciones, las operaciones de menos de 250 mil euros cerrarían el año en los 153 mil millones de euros (+7.1% vs 2017), las operaciones entre 250 mil euros y 1 millón en 38 mil millones (-5.7%) y las de más de 1 millón en los 152 mil millones (-1.61% vs 2017). Previsiblemente veremos un repunte de las operaciones nuevas entre 250k y 1 millón que mantendría la tendencia de años anteriores.
En cuanto al tipo de interés de las nuevas operaciones se invierte la tendencia de tipos a la baja de los últimos años, de forma muy tímida, pero parece que en 2018 podríamos ya haber superado el mínimo de tipos, y lo que vendría en los próximos años sean tipos al alza. El tipo de las nuevas operaciones a menos de 1 año queda en el 1.93% (vs 1.89% 2017), entre 1 y 5 años en el 1.94% (vs 1.94% 2017) y el de operaciones a más de 5 años en el 1.76% (vs 1.64% 2017). Este último dato, la subida en las operaciones a más largo plazo ya es una señal inequívoca de que la curva de tipos está dando la vuelta.
Sigue siendo un buen momento para obtener financiación nueva en el caso de las pymes, los tipos siguen bajos, aunque empiezan a darse la vuelta y podría ser una buena oportunidad todavía, especialmente para cerrar operaciones a largo plazo, donde los bancos han mostrado más apetito en los últimos años. Por otro lado los bancos siguen mostrando apetito por prestar porque, aunque los tipos subirán, siguen muy bajos y sólo con mucho volumen obtienen márgenes suficientes.