
La rotación de activos es un ratio financiero que mide la eficiencia con la que una empresa utiliza sus activos para generar ventas. Este indicador revela cuántas veces los activos de una compañía se convierten en ingresos durante un periodo determinado, generalmente un año.
La fórmula para calcular la rotación de activos es la siguiente:
Rotación de Activos = Ventas Netas / Activos Totales
Donde:
Un valor alto en este ratio indica que la empresa está utilizando sus activos de forma eficiente para generar ingresos. Por el contrario, un valor bajo puede reflejar una gestión ineficaz de los recursos o una infrautilización de los activos. El ratio de rotación de activos es clave para detectar ineficiencias en el uso de recursos, optimizar inversiones y mejorar la rentabilidad empresarial aunque, como otras medidas, no es aconsejable valorarlo de forma aislada si no junto a otros ratios para tener una visión más global de la salud financiera de una empresa.