
El renting es una fórmula de arrendamiento a medio o largo plazo que permite a las empresas disponer de bienes (como vehículos, equipos informáticos o maquinaria) a cambio del pago de una cuota mensual fija.
A diferencia del leasing, el renting incluye servicios adicionales como mantenimiento, seguros y reparaciones, lo que permite a la empresa despreocuparse de la gestión del activo.
El renting es especialmente útil para empresas que desean renovar sus equipos periódicamente o que no quieren asumir la propiedad del bien. Además, las cuotas del renting suelen considerarse gasto deducible, lo que aporta ventajas fiscales.
Una empresa de transporte puede optar por el renting de una flota de vehículos, beneficiándose de la renovación constante de sus unidades y evitando costes inesperados por averías.