
El precio de equilibrio es el valor al que se igualan la cantidad demandada y la cantidad ofrecida de un bien o servicio en un mercado. Es decir, es el precio al que los consumidores están dispuestos a comprar exactamente la misma cantidad que los productores están dispuestos a vender, permitiendo el equilibrio de mercado sin excedentes ni escasez.
Este concepto es fundamental en economía y análisis de mercados, ya que representa un punto de estabilidad en el que no existen presiones naturales para que el precio suba o baje, siempre que las condiciones del mercado permanezcan constantes.
Otra definición del precio en equilibrio la encontramos en el contexto del modelo del punto de equilibrio (o break-even), donde el precio de equilibrio se refiere al precio necesario para llegar al mínimo de venta que una empresa debe conseguir para cubrir todos sus costes (fijos y variables) con un determinado volumen de ventas. A este precio, la empresa no obtiene ni beneficios ni pérdidas; cualquier precio inferior generaría pérdidas y cualquier precio superior permitiría obtener beneficios.
Este enfoque del precio de equilibrio no parte de la lógica de oferta y demanda del mercado, sino del análisis interno de costes y márgenes de la empresa. Es útil en diferentes facetas estratégicas como la fijación de precios, el lanzamiento de productos o la evaluación de proyectos.
Fórmula del precio de equilibrio:
Precio de equilibrio=(Costes fijos totales+(Coste variable unitario×Unidades esperadas))/Unidades esperadas
También puede derivarse directamente si se conoce el punto de equilibrio en unidades y se desea hallar a qué precio debe venderse el producto para alcanzar ese punto.