
La línea de descuento es una herramienta de financiación mediante la cual una empresa anticipa el cobro de efectos comerciales, como letras de cambio, pagarés o recibos. Este mecanismo permite a la empresa obtener liquidez inmediata sin esperar a la fecha de vencimiento del efecto comercial.
Las entidades financieras analizan los documentos y, si se aprueban, adelantan el importe descontando una comisión e intereses por el servicio. La principal ventaja de la línea de descuento es que mejora el flujo de caja sin aumentar el endeudamiento directo de la empresa.
Imagina a una empresa que ha cobrado una factura con un pagaré de vencimiento a 60 días puede acudir a su banco para descontarlo y obtener el importe por adelantado, garantizando así la liquidez para financiar sus operaciones diarias.
La línea de descuento es especialmente útil para empresas que operan con ventas a crédito y desean acelerar la entrada de efectivo.