
La inflación es el incremento sostenido y generalizado en los precios de bienes y servicios durante un periodo de tiempo determinado. Este fenómeno provoca que el valor del dinero se reduzca, ya que con la misma cantidad de efectivo se pueden adquirir menos productos o servicios.
Las causas principales de la inflación pueden clasificarse en tres categorías:
La inflación se mide mediante índices como el IPC (Índice de Precios de Consumo), que refleja la variación de los precios en una cesta representativa de productos.
Un nivel moderado de inflación es considerado positivo para la economía, ya que estimula el consumo y la inversión. Sin embargo, una inflación excesiva reduce el poder adquisitivo y genera incertidumbre económica. Para controlar este fenómeno, los bancos centrales aplican políticas monetarias que regulan el tipo de interés y la oferta monetaria.