Abanca anula finalmente la OPA sobre Liberbank
A principios de enero, la fusión entre Unicaja y Liberbank parecía una operación casi cerrada en un futuro próximo. Sin embargo, el viernes 22 de febrero se vivió un día de numerosos comunicados que abrían una posibilidad diferente: el planteamiento por parte de Abanca de una OPA sobre Liberbank, operación que finalmente no se llevará a cabo.
Esta situación ha derivado en un proceso de gran complejidad dentro del sector bancario, cuyos puntos fundamentales explicamos a continuación.
La OPA sobre Liberbank de Abanca
El viernes 22 de febrero, Abanca, entidad bancaria proveniente de lo que era Nova Caixa Galicia, anunció su sólido interés en hacerse con el 100% del capital del banco asturiano Liberbank.
El objetivo de la firma gallega era crear, dentro del sector financiero de España, una de las entidades más sólidas y de mayor solvencia. Y además, lograr una presencia fundamental en la zona norte de nuestro país, así como en Castilla la Mancha y Extremadura.
Abanca ofrecía un desembolso de más de 1.600 millones de euros, en concreto un precio por acción de 0,56 euros. Esto implicaría una prima del 42% sobre los valores de cierre del día anterior al anuncio. Como tras conocerse la noticia Liberbank ascendió un 19,9% en Bolsa, la prima quedó mucho más ajustada.
Desde los mercados, el proceso se entendió como una operación hostil. Sin embargo, desde Abanca se defiende que no se pretendía siquiera hacer una OPA sobre Liberbank, sino que no se siguieron los procedimientos formales para no interferir en el proceso de fusión entre este último y Unicaja.
La OPA sobre Liberbank queda anulada
El 25 de febrero, la Comisión Nacional del Mercado de Valores otorgaba a Abanca 10 días improrrogables para lanzar su OPA sobre Liberbank. Considerando que este banco continúa adelante con el proyecto de fusión con Unicaja, para Abanca se hace imposible llevar a cabo una revisión y decidir de manera definitiva la OPA sobre Liberbank y sus condiciones en dicho plazo.
Debido a este motivo, desde la entidad gallega se ha renunciado al interés por una operación corporativa con Liberbank por el momento.
No se descarta un nuevo intento
El fracaso de la OPA sobre Liberbank dificulta la vía de crecimiento proyectada por el presidente Abanca, Juan Carlos Escotet.
Ya el año pasado se hizo con la filial de Deutsche Bank en Portugal y también finalizando ese mismo año Abanca compró la filial de Caixa Geral de Depósitos en España. El activo logrado al cerrar 2018 ha sido de 51.000 millones, a los que se podrían haber añadido 40.000 millones más con la OPA sobre Liberbank.
En estos momentos, únicamente Liberbank le permitiría a la firma de procedencia gallega alcanzar el puesto entre los 6 grandes bancos españoles. Además, la adquisición de esta firma le llevaría a rondar la cifra de 100.000 millones de balance, que muchos piensan que es la apropiada para empezar a crecer con ahorro de costes.
Por este motivo, si las negociaciones de fusión entre la firma asturiana y Unicaja no se concluyen en buen término, no se descarta abrir una nueva operación para adquirir Liberbank. En este sentido, la banca gallega presenta la facilidad de contar ya con un plan de negocio diseñado y con los modos de financiación para llevar a cabo dicha compra.
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